En algún lugar de la costa atlántica, el hombre medita acerca de su insignificante puesto en el cosmos.
El hombre duda, vacila y se estremece. Agobiado, se sienta en la orilla.
Ensimismado, realiza un vertiginoso balance de su vida.Su mente conmocionada se detiene febril en una imagen, fugaz pero obsesiva, terrible, demoledora...
Involuntariamente, el hombre vuelve a evocar a Alfonsina Storni. Pero logra contenerse y encuentra consuelo en la lectura. Sí, ya sé, ustedes van a decir de dónde carajo sacó el libro. Bueno, no jodan, que en las películas de Palito Ortega aparecían en el medio del campo la guitarra, los coros y las bailarinas y nadie se quejaba. Así que no nos vengan a bardear a nosotros por un librito piojoso.
Reconfortado por la lectura, una débil luz de esperanza nace en el corazón del hombre. Tal vez su vida ya no sea sólo una sombra vana...
Y así, poseído por una irresistible sed de conocimientos, el hombre inicia un nuevo itinerario hacia la sabiduría...
Y avanza decidido, sin reparar en las miradas curiosas...,
...en las cargas...
...en los obstáculos...,
...en el peligro...,
...ni siquiera en el paisaje.
Apenas si se detiene para el más indispensable sustento...
Finalmente, el hombre encuentra las respuestas...
Pero ahora, eterno insatisfecho...,
Agradecimientos: Romina Palucas, Francisco Games, Mario Bernardi y flia, Gustavo Lopez, Nahuel (Chaca).
excelente.. ese libro lo tengo me lo hubieras pedido!!!
ResponderEliminarja,ja,ja, me hicieron reir,y si el efecto buscado es "dar ganas de ver la peli" ya lo estan logrando!! si no me voy de vacas, seguro asisto;si no, pasame el dvd Fer!!he,he
ResponderEliminarbesos
p.d:aguante el pinchaaa!!!