PRESENTA
En la década de 1920 la Alta Sociedad platense se vio conmovida por un par de hechos vinculados a dos de sus familias más distinguidas. El primero fue un trágico incendio, cuyas causas nunca fueron esclarecidas, en el que se extinguieron simultáneamente y casi por completo los Vedia (fundadores de Estudiantes de La Plata) y los Barranco (fundadores de Gimnasia y Esgrima de La Plata).
El segundo, el matrimonio, celebrado poco tiempo después en la Iglesia San Ponciano de los únicos dos sobrevivientes de los augustos linajes: Ernestina de las Angustias y Vedia y Nicasio Telésforo Barranco. Aunque al principio la boda fue recibida con frialdad y hasta con cierto escándalo (los novios no respetaron el período de luto, de rigor por entonces) muy pronto los Barranco se granjearon el afecto de todos, debido a su simpatía y don de gentes derrochada en los salones de charleston y fox-trot, el Casino de Mar del Plata, el Jockey Club o en los certámenes de bridge y de canasta.
Las sombras negras del pasado parecieron disiparse cuando la nueva familia se vio bendecida por la llegada de su única hija, Elisa Felicitas de la Concepción Barranco y Vedia.
Sus padres, buscando que la niña recibiera una esmerada educación acorde con su abolengo y rango social, encomendaron su crianza a la más prestigiosa institutriz del momento, Miss Mary Zozaya, prima de quien luego sería el famoso centrodelantero pincha.
Pero en 1946, nuevamente la tragedia sacude los cimientos de la casa Barranco y Vedia. En el día de la boda de la joven Elisa, su prometido, Oliverio (las crónicas no registran su apellido pues se trataba de un simple plebeyo), desaparece misteriosamente. Elisa muere el mismo día, según se creyó entonces, de pena.
Pasan los años, y ya en la época actual don Nicasio Barranco, viudo desde el fallecimiento repentino de su amada Ernestina en agosto de 1967, se ve sacudido por un funesto presentimiento. Simultáneamente José
(tampoco se sabe el apellido: otro plebeyo) pasea por cábala por los alrededores de un edificio histórico de la ciudad de La Plata, mientras escucha por la radio el partido del Lobo. Imprevistamente y contra su voluntad es atraído por una fuerza sobrenatural que lo obliga a cambiar de rumbo y lo enfrenta con un ser monstruoso que le exige su ayuda.
La tragedia se desencadena.
Para Elisa, una historia de odio, amor, muerte, venganza… y fulbo.
Protagonizada por
Fernanda Cataldo, pincha.
Markos Spanevello, tripero.
SINTESIS ARGUMENTAL
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